Una niña de nueve años «da con frecuencia mejor resultado en la cama que una joven de 20«, afirma el imán marroquí Mohamed Ben Abderrahman Al Maghraoui que, incluso, afirma que personalmente ha constatado esa ventaja.
Éste emitió a principios de septiembre una fatua (edicto islámico) en la que «legaliza» la unión entre una chiquilla y un hombre adulto. «Nos han contado, y hemos constatado, que las niñas de esa edad dan mejores prestaciones que las mujeres adultas«, afirma. «En consecuencia están tan capacitadas para contraer matrimonio como las jóvenes de 20 años».
El teólogo fundamenta su edicto en el ejemplo del profeta Mahoma que se casó con una niña de siete años, aunque solo consumó elmatrimonio cuando cumplió los nueve.
Y si eso hizo el Profeta, que tenía contacto directo con Dios, ¿cómo no seguir su ejemplo?.
Todos los deslumbrados por la «humanidad y el progresismo del Islam» quizás deberian reflexionar. Y todas las personas civilizadas deberian exigir una rectificación de los islamistas a todas sus vulneraciones de los derechos humanos. Ya no vale con decir que hay que «respetar». Hay que defender esos derechos sin miedo.